El sabado pasado decidi que despues de varios meses por aqui ya hora de visitar la ciudad de Mosta, una de las mas grandes de la isla. El transporte publico en esta isla hace que me convierta en la persona mas perezosa para visitar lugares nuevos. Los autobuses no son puntuales y tampoco especialmente baratos. Haciendo un esfuerzo salte de la cama y me dirigi a una nueva poblacion. En Mosta descubri que aun quedan resto del Imperio Britanico y la que la gente mayor se sientan en la calle sencillamente "para ver quien pasa", una costumbre valenciana que comenzaba a echar de menos
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